Joyas para un amor de verano

Dejamos atrás las preocupaciones. El trabajo, las clases y todo aquello que nos ha acompañado durante el año. Rompemos nuestra monotonía. Salimos mucho más. Visitamos lugares extraordinarios y, en muchas ocasiones, conocemos gente nueva.

En este contexto es fácil que alguien centre todas nuestras miradas y, en el caso de que sea recíproco, iniciemos una nueva historia de amor. Un amor de verano.

Y, además de pensar que, como cantaba el Dúo Dinámico “el final del verano llegará y tu partirás”, nos sumiremos en un huracán de sensaciones a las que querremos ponerle besos, abrazos, palabras…y detalles con los que demostrar que, pese a los pocos días pasados, la intensidad es lo que importa.

En estos casos, una joya suele ser un detalle que dejará una huella indeleble en el recuerdo de este verano y, posiblemente, abra la puerta a algo más. ¿O acaso ha de acabarse el amor con la llegada de septiembre?

Díselo con corazón

Los corazones son el símbolo universal del amor. ¿Por qué no regalar un colgante con la mitad de nuestro corazón a esa persona que se ha hecho con él?

Siempre podemos organizar la entrega con las dos partes de ese corazón, simbolizando que cada uno de nosotros guardará su mitad a la espera de volver a componerlo. Los detalles siempre tienen una amplia lectura.

¿Y que te parece si le entregamos la llave de nuestro corazón? En forma de llavero, podemos entregar, precisamente, todo nuestro amor. Este bonito complemento, en el que encontramos conjuntamente la cerradura de nuestros sentimientos más íntimos y la llave que los abre.

Cada vez que se abra una puerta, nuestro recuerdo volará a su mente reavivando la llama del amor.

Y si quieres llevar tu amor de verano hasta el compromiso…

Puede suceder que, en pocos días o semanas, estés seguro de que esa persona es con la que quieres compartir el resto de tu vida. Es algo que deberás sopesar bien, pero si finalmente tu respuesta es afirmativa, puedes decírselo con una joya.

Un anillo es una de las formas más claras de “sellar” un compromiso y pedir que esa persona se quede a nuestro lado.

Te proponemos este anillo de compromiso en plata y circonitas que, pese a su sencillez, simboliza un claro mensaje: “Te quiero y me gustaría que te quedes conmigo”.

Nota importante: Por el bien de vuestro corazón, os recomendamos que os aseguréis bien de que la persona a la que os dirijáis con cualquiera de estos detalles siente, como mínimo, algo similar por vosotros.

No hace falta que os digamos que, en verano, todo se ve con un optimismo desbordante y es posible que nos llevemos una sorpresa ante esa chica o chico al que hemos estado haciendo ojitos en la piscina días y días y que, pese a no haber intercambiado ni una palabra, estamos convencidos de que bebe los vientos por nosotros. ¡Avisados estáis!